En mi opinión, el estado no debería prohibir el tabaco, aun si es solo en lugares públicos. Políticamente esto afectara a una buena parte de la población votante que podría usar su voto como castigo a un gobierno que lo prohiba. Además, creo que se podría hacer un mejor cambio en la cultura del tabaco que tienen muchas personas con programas de educación temprana y programas de rehabilitación.
Otro punto es que de por sí los fumadores ya tienen algunos espacios reservados en la mayoría de lugares públicos para evitar molestar a los no fumadores y una prohibición es una medida muy represiva.